Montpellier (en francés, Montpelhièr en occitano) es una ciudad del sur de Francia de menos de 300.000 habitantes, capital de la región Languedoc-Roussillon. Hasta hace unos meses a nadie que yo conozca se le había perdido nada por allí pero, desde que Rodrigo García dirige su Centro Dramático Nacional, últimamente Montpellier se cuela en muchas de nuestras conversaciones. Lo primero que hizo el nuevo director es cambiarle el nombre al CDN. Ahora se llama Humain Trop Humain (en referencia a un libro de Nietzsche). A parte de los chascarrillos que circulan sobre el nombre en cuestión, un vistazo a su programación levanta el apetito y provoca ciertas preguntas incómodas como, por ejemplo, ¿cómo puede ser que el Centro Dramático Nacional de una ciudad de 300.000 habitantes tenga semejante programación (escénica, musical y demás) y no haya ni un solo Centro Dramático Nacional o Teatre Nacional en todo el Estado español con algo remotamente comparable, teniendo en cuenta que en ciudades como Barcelona o Madrid, la población se cuenta por millones? ¿Cómo puede ser que muchos de los nombres incluidos en esa programación sean de gente que vive en el Estado español y que jamás veamos esos mismos nombres en las programaciones de nuestros Centros Dramáticos Nacionales o Teatres Nacionals?