¡Qué miedo hay a decir lo que se piensa! ¡Cuántos problemas da todavía! ¡Qué coñazo vivir preocupado por lo que se puede o lo que se debe decir y lo que no! ¡Cuánta hipocresía! Todo el mundo rajando por las esquinas y luego, a la hora de la verdad, todos calladitos. Y desconfía de los que presumen de decir lo que piensan. Quien esté libre de pecado que tire la primera piedra.
Dos posts que me han hecho reflexionar sobre el tema:
Visto en salonKritik, copio y pego:
«Observo con perplejidad que Lo que yo te diga, el blog de Fernando Castro Flórez, ha sido eliminado. No he tenido aún la oportunidad de hablar con Fernando y saber las razones que lo han llevado a tal decisión. De todos modos, es una pena para la libertad de expresión en Internet. Fernando es uno de los pocos que escribe, literalmente, lo que le sale de los huevos. Envidio y admiro su libertad y su capacidad para proponer problemas y debates pasándose por la entrepierna la corrección política y enseñando siempre la mano que tira la piedra, dando ejemplo a la vergonzosa cantidad de anónimos comentaristas que pueblan la red. Seguro que seguirá dando lecciones de crítica desde otras atalayas. Escriba donde escriba, aquí siempre tendrá un lector. »
Aplazamiento de arte y censura
Visto en Reflexiones y balidos, copio y pego:
«Teníamos una propuesta para el próximo jueves 28 de mayo en el Teatro de los Manantiales, una charla coloquio titulada ARTE y CENSURA.
Tema muy interesante a la vez que espinoso.
En los comentarios adjuntos explico las razones de su aplazamiento y el nuevo planteamiento para abordar esta propuesta que tendrá lugar después del verano y que anunciaremos debidamente para que los que estén interesados puedan participar.
«ver oír y callar es pan para hoy y hambre para mañana»
Y el comentario al que se refiere es este (copio y pego, de nuevo):
«La consultas que hice a la mayoría de amigos, colegas, gente cercana, conocidos y conocidos de conocidos.. de tratar este tema de la censura en el arte, obtuve una respuesta fantástica, fantástica. Todas las reacciones fueron positivas, a todo el mundo le pareció muy interesante y necesario de analizar, discutir sobre ello, exponerlo darlo a conocer. Realmente sentí que conectaba con todo el mundo, me sentía en sintonía con la realidad y eso me animó a seguir adelante y concretar las cosas. Hablé con Eugenia aunque de una manera vaga al principio pero que fue creciendo el interés y siempre me he sentido apoyado por ella, hablamos con Carolina, hablé con Manantiales que cedía un espacio y Ximo se brindaba a estar en la mesa para el coloquio y aportar su experiencia y su visión en el tema. Mi pilar básico en ese momento era Carolina Boluda que acababa de tener un caso de censura»de manual» como decía ella y era esencial que estuviese en esa mesa. Además de aportar toda su experiencia y conocimiento sobre el tema. Cuando empecé a proponer a diversas personas la posibilidad de participar y hacer publico sus casos para analizar y dar a conocer al espectador lo que en la mayoría de ocasiones no es consciente ni conocedor respecto a casos de censura, muchas de las respuestas que recibí fueron la negativa ante ello. Por miedo a represalias, por temor a las consecuencias sin duda negativas que ello les podía acarrear. Es totalmente lícito actuar de esta forma. Cada persona es libre de elegir si decir las cosas y como decirlas. Denunciándolas o no, criticándolas o no. Al menos en esto somos libres. Una lástima que actuamos así en ocasiones por miedo y no por total autonomía, consciencia y libertad.
el caso es que esto dejaba la mesa un tanto desvalida de como la imaginaba y teniendo muy poco tiempo para reaccionar, este era el primer motivo que me recomendaba un aplazamiento de la fecha.
Pero eso no significa de desistiera, todo lo contrario.
Seguí intentando recabar información de más casos, de personas que habían sufrido situaciones de censura e intentando hablar con ellas. De hecho este es el camino que llevo ahora. Conocer más casos, entrevistarme con sus víctimas, proponerles la opción de este coloquio abierto, que sepan que tienen la oportunidad de expresarse, de contarlo y mostrarlo al público. Esto me ha hecho -y solo estoy al principio- tirar de hilos que me estoy dando cuenta que son largos, rozando resortes que veo son muy sensibles y que reaccionan a la mínima e intuyo que hay mucho por descubrir y de lo que hablar. Así que queda mucho por hacer, mucha información que recabar y gente con la que encontrarme. Todo esto necesita tiempo y esfuerzo y necesita procesarse mínimamente. Así que esta segunda razón, más tiempo, más investigación, más elaboración para llevarlo a cabo de una manera digna y honesta es la que me recomienda que lo aplace para más adelante.
Lo propondré en la próxima reunión del laboratorio de …Balidos. no he recibido mucha respuesta por parte del grupo y tampoco quiero obligar o imponer una actividad o una propuesta donde solo recibo señales de unos pocos. Pienso que incluso el tema da para un blog específico, abierto por supuesto y que necesitaré ayuda y colaboración, yo solo no hago nada. La mayoraía ya sabéis que si queréis comentar alguna cosa estoy abierto y dispuesto a ello, incluso me agradaría que ocurriese más a menudo…
podemos hablar en cualquier momento, nos vemos pronto.
marc»