Una de las primeras decisiones de à€lex Rigola como director del Lliure fue disolver la Orquestra del Lliure, una orquesta de cámara dirigida por Josep Pons, dedicada a la música del siglo XX. La labor de estos músicos en su momento fue encomiable y su actitud enormemente abierta para lo que se acostumbraba entre el gremio clasicorro. Pero Rigola dijo entonces algo así como que el Lliure debía apostar por dedicar todos sus recursos al teatro, no a un grupo de músicos. Ahora Carles Santos, el premio nacional de música 2008, es el residente del Lliure y toca con Barcelona 216, grupo residente en el Auditori. Y estrena un concierto para piano y orquesta con él como compositor y solista, estrella absoluta. Como en el siglo XIX. En el Radicals Lliure. Dice que ya le tocaba. Dicen que Santos cree que «las mismas personas escuchando lo mismo en el Lliure reaccionan de manera diferente si se encuentran en el Auditorio, al igual que los músicos«. Está claro. Santos ha conseguido rodearse de un halo de prestigio. Haga lo que haga el Teatre Lliure le aplaude.
Carles Santos, Cesc Gelabert, Mal Pelo, Agustí Fernández … Como dijo John Cage cuando se piraba de un concierto del entrañable LlorenৠBarber: «Esto es Wagner». Tanta unanimidad asusta.
ACTUALIZACIà“N (25/05/2009): Interesante intercambio de comentarios sobre este post en TEATRON.