Me llevo el único libro que tengo de Angélica Liddell a la mani como arma de defensa. Con el jeto de Angélica por delante los mossos no tendrán cojones.
Me llevo el único libro que tengo de Angélica Liddell a la mani como arma de defensa. Con el jeto de Angélica por delante los mossos no tendrán cojones.